Hace 20 años, el diseñador de moda brasileño Jum Nakao sorprendió al mundo con su icónico desfile “A Costura do Invisível” en la São Paulo Fashion Week. Sin embargo, no fue solo la belleza y la creatividad de sus diseños lo que llamó la atención, sino también su poderoso mensaje contra la globalización de la industria de la moda.
En aquel entonces, la industria de la moda estaba en pleno auge de la llamada “fast-fashion”, donde las grandes marcas producían ropa barata y de baja calidad en masa, sin tener en cuenta el impacto en el medio ambiente y en las condiciones laborales de los trabajadores. Esta tendencia estaba afectando no solo a la industria de la moda, sino también a la sociedad en general, promoviendo el consumismo desenfrenado y la falta de valoración por el trabajo artesanal y la creatividad.
Fue en este contexto que Jum Nakao decidió hacer su manifesto contra la globalización de la moda en su desfile. Con su colección “A Costura do Invisível”, el diseñador presentó una serie de vestidos blancos hechos de papel, que simbolizaban la fragilidad y la efimeridad de la moda rápida. Pero lo más impactante fue lo que sucedió al final del desfile.
Mientras los modelos desfilaban con los vestidos de papel, Jum Nakao se subió al escenario y comenzó a cortarlos en pedazos, uno por uno. El público quedó atónito y muchos no pudieron contener las lágrimas al ver cómo se destruían las hermosas creaciones del diseñador. Pero esta acción tenía un significado mucho más profundo.
Con su gesto, Jum Nakao quería mostrar cómo la industria de la moda estaba destruyendo la creatividad y la belleza en nombre del lucro y la producción en masa. También quería hacer un llamado a la reflexión sobre el impacto ambiental y social de la moda rápida. Y lo logró. Su desfile se convirtió en un símbolo de resistencia y conciencia en un mundo cada vez más consumista y desechable.
Después de aquel desfile, Jum Nakao se convirtió en una figura importante en la lucha por una moda más sostenible y consciente. Continuó creando colecciones impactantes y con mensajes poderosos, como “A Luz que Veste” en 2004, donde utilizó la luz como elemento principal en sus diseños para resaltar la importancia de la energía y la iluminación en la producción de moda.
Hoy en día, 20 años después de su icónico desfile, el mensaje de Jum Nakao sigue siendo relevante y necesario. Aunque ha habido avances en la industria de la moda en términos de sostenibilidad y ética, aún queda mucho por hacer. La moda rápida sigue siendo una realidad en muchos países y el impacto ambiental y social de la industria sigue siendo preocupante.
Sin embargo, gracias a diseñadores como Jum Nakao, cada vez hay más conciencia sobre estos temas y un movimiento hacia una moda más responsable y consciente. Cada vez más marcas están adoptando prácticas sostenibles y éticas en su producción y los consumidores están exigiendo transparencia y responsabilidad a las empresas de moda.
En este sentido, el legado de Jum Nakao sigue vivo y sigue inspirando a nuevas generaciones de diseñadores y consumidores a ser más críticos y conscientes en su relación con la moda. Su desfile “A Costura do Invisível” fue un momento histórico en la moda brasileña y en la lucha por una industria más justa y sostenible. Y hoy, 20 años después, su mensaje sigue resonando y su impacto sigue siendo relevante en un mundo que sigue luchando por un cambio hacia un futuro más sostenible.